Cristianismo

Encuesta sobre los beneficios transformadores de la Biblia

Un estudio encontró los que leen la Biblia al menos tres veces al año, han experimentado una transformación positiva.

La Sociedad Bíblica Americana lanzó el séptimo capítulo de su reporte anual número 12 “Estado de la Biblia” el miércoles 12 de octubre. El mismo se basó en el “uso de la Biblia”. La encuesta se llevó a cabo entre el 10 y 28 de enero y define “usuarios de la Biblia” a aquellas personas que dijeron interactuar con las Escrituras al menos tres o cuatro veces al año sobre una minoría cristiana que confesó no leerla.

Entre el grupo de “usuarios de la Biblia”, el 92% respondió de manera afirmativa cuando se les preguntó si “el mensaje de la Biblia había transformado sus vidas”. Solo el 8% dijo lo contrario. Por contraste, una mayoría de los que respondieron en la categoría de no “usuarios de la Biblia” (62%) no veía el mensaje de la Biblia como fuente de transformación para sus vidas, mientras que el 38% sí.

El director del ministerio de inteligencia para la Sociedad Bíblica Americana, John Farquhar Plake, expresó en un comunicado: “Aunque hemos reportado una caída en la lectura de la Biblia, cerca de 60 millones de personas que tienen contacto con la misma al menos tres veces al año, dijeron que había tenido un impacto transformador en sus vidas. Nuestra encuesta muestra que una interacción consistente con la Palabra de Dios nos cambia”.

Y destacó: “Cómo Iglesia, debemos mostrar en cada oportunidad a nuestros vecinos el amor transformador de Jesús – que se encuentra en cada palabra de la Biblia”.

Asimismo, la encuesta pidió a los “usuarios” identificar sus métodos para el uso de la Biblia, encontrando que el 48% del grupo “leía varios libros a la vez”; 40% de los usuarios leía pasajes según su humor; 32% se dedicaba a capítulos enteros o historias de una sola vez; el 26% seguían un esquema, plan o programa para leer y el 22% leía la Biblia todos los días a la misma hora.

Otra diferencia ha sido las formas entre hombres y mujeres; mientras los hombres preferían leer capítulos o historias completas de la Biblia de una sola vez, las mujeres preferían otros métodos. La encuesta también examinó las maneras de uso bíblico en tres categorías de respuestas, clasificadas en base  a 14 tópicos acerca de la frecuencia del uso y el impacto y centralidad del mensaje.

Las escrituras se conectaban con los encuestados, aquellos con más altos puntajes eran más propensos a leer capítulos enteros o historias bíblicas, en comparación a los que tenían menos puntos.

Más del doble de los comprometidos con la lectura (37%) seguían un esquema, plan o programa que los que lo hacían según el humor (19%) y los que no leían casi nada (13%). Los que lo hacían esporádicamente, tenían la tendencia a elegir pasajes basados en su ánimo (40%) y leer unos pocos

versos a la vez (50%) que los más comprometidos. 49% de los comprometidos leía varios versos a la vez, mientras que el 39% elegía pasajes según el ánimo.

Además, el estudio reveló que leer la Biblia impresa era lo más común, con el 69% citando el método tradicional para exponerse a la Palabra. Más de la mitad dijo que usa aplicaciones en dispositivos electrónicos (48%), ven programas bíblicos (46%), buscan contenido bíblico en la web (46%), se enlistan en un devocional (29%) o escuchan predicas (28%).

Al ser clasificados por la edad demográfica, la mayoría de los adultos de 58 años o más (75%) así como los de 18-27 (65%) reportaron leer de una Biblia impresa en el mes previo a la encuesta. La mayoría de los jóvenes usaron aplicaciones (53%) y buscaron en internet (57%), mientras que el 35% usaron métodos tradicionales y modernos.

Un alto número de usuarios adultos (46%) adoptó un plan de lectura en el mes antes de la encuesta, junto a un 35% de los jóvenes. Por otro lado, más jóvenes (32%) vieron programas bíblicos, en comparación con los adultos (23%).

La encuesta también investigó si las personas eran capaces de “perdonar sinceramente a quien les haya hecho algo, sin importar si les pedían o no disculpas”. 47% de los comprometidos con las Escrituras respondieron positivamente. Solo un 4% dijo que no podía y un 2% que no lo haría.

La mayoría de los que leen esporádicamente dijo que si perdonaría, seguido por un 20% que no lo harían y 4% que no querían perdonar. 48% de los que no leen la Palabra tal vez perdonarían a quienes les ofenden, un 30% no y un 10% estaban totalmente en contra.

 

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