Nueva visita de la Virgen que estuvo en la guerra de Malvinas
La imagen de Nuestra Señora de Luján que estuvo en Malvinas durante la guerra de 1982 recorrió varias localidades del país y, esta vez, de las diócesis correntinas, entre ellas Paso de los Libres, Santo Tomé y Liebig el 10 de diciembre.
La Virgen tiene una historia muy especial debido a que, tras estar presente en las Islas del Atlántico Sur, una vez concluidos los combates fue trasladada por los ingleses a la catedral de Aldershot, donde permaneció durante 37 años hasta que pudo ser recuperada por la Argentina.
Antes de retornar a su país, fue bendecida por el Papa Francisco. “Una hermosa bendición de Dios y de la Virgen”, destacaron desde la diócesis.
La historia de la imagen
Durante el conflicto bélico por Malvinas e islas del Atlántico Sur, se realizaban donaciones para colaborar con los soldados que estaban en el frente, desde chocolates, gorros, bufandas, etc. Una familia decidió comprar una imagen de la Virgen para enviarla a los soldados.
Así fue como la imagen arribó a las Islas Malvinas una semana después del desembarco argentino de recuperación del archipiélago insular, más precisamente el 9 de abril de 1982. Su objetivo era acompañar a los soldados argentinos.
El 8 de mayo se celebró una misa y una procesión en honor a la Virgen de Luján. Luego, a modo de resguardo, permaneció en la capilla local Saint Mary hasta la finalización del conflicto.
Con el cese del fuego, un capellán inglés la llevó al Reino Unido y la colocó en la catedral castrense, donde estuvo durante 37 años para rezar por los caídos de ambos países.
En 2016, en un artículo de la Gaceta Malvinense, un médico y soldado inglés contaron sobre la existencia de la imagen y afirmaron que estaba en una catedral británica. Un grupo de laicos argentinos (La Fe del Centurión) de la diócesis de Quilmes (Buenos Aires), empezó a seguir el rastro de la imagen y le pidieron al obispo castrense argentino, monseñor Santiago Olivera, que realice las gestiones para que pueda retornar al país. Para negociar su vuelta, desde Argentina se ofreció una réplica para reemplazarla en Gran Bretaña.
El 30 de octubre del 2019 el obispo inglés y monseñor Olivera hicieron el intercambio de las imágenes en el Vaticano, donde fueron bendecidas por el Papa Francisco. Una vez en suelo argentino, se emprendió la búsqueda de la familia que donó la imagen. En esa cruzada y con motivo de los 40 años del conflicto de Malvinas, se decidió que la Virgen «Malvinera» recorra el país para llevar consuelo a las familias y excombatientes.
Debajo de la imagen hay una inscripción que dice «familia Benso» que fue la que donó la imagen. No se había podido encontrar a esta familia en un primer momento, pero cuando durante su recorrido, llegó a la diócesis de Merlo, aparecieron. El hombre era panadero, y ya falleció, pero queda su esposa y sus tres hijos.
